Vasta de vurradas
Atilio, el marido de Ofelia, puso en su portafolio los utensilios para ir al concilio sobre familias en el exilio. Mientras Atilio se va al concilio, vamos a mirar un rato algún programa en la tele donde enseñen a cocinar. Ahí aprenderemos cómo hacer algún rico plato fusión… y también un nuevo y pobre uso de nuestra vapuleada gramática. Son varios los jóvenes cocineros que se valen de los “utensiyos” para preparar sus platos de autor. Hasta hace poco, los cucharones, espumaderas y sacacorchos se llamaban utensilios. Hoy han pasado a ser “utensillos”, y por ende, los nombramos a la argentina, con una sonora y reverberante Ye. Puede ser que en un tiempo, finalmente se resuelva simplificar, y usar indistintamente la c, la s y la z. Amalgamar la v y la b, emparentar la j y la g, erradicar la h inicial. Seguramente leeremos que la casa y la pesca son actividades para jente baliente a la que le gusta acer cosas ejtrabagantes. O algo así. Pero para eso falta, ya que to